Albert Einstein Una historia de Purim

Tengo un amiguito que se llama Noah, todavía no es un Bar-Mitzva, pero ya casi.

Noah es muy curioso, quiere saberlo todo.

Hace unos días él y su hermana Maya comían en la mesa contigua a la mía, y empezamos a hablar de su deporte, el tenis, cuando de repente se hizo un silencio y Noah dijo:

- ¡Albert Einstein inventó la bomba atómica! 

No le dije que él no la había inventado, pero le mencioné los descubrimientos que Einstein sí hizo, y que publicó en su maravilloso año - Annus Mirabilis - de 1905: 

El Efecto Fotoeléctrico, con el que demostró que la luz o la radiación electromagnética sobre algún material provoca la salida de electrones desde él. Concluyó que la energía de la luz u otra fuente de radiación, que desprende electrones de los átomos con los que choca, se intercambia en cantidades discretas o cuantos de energía. Ese es el principio de la Teoría Cuántica. Por el descubrimiento del Efecto Fotoeléctrico Einstein recibió el Premio Nobel en 1921. 

El Movimiento Browniano, estudiando el movimiento microscópico de líquidos, como lo había hecho el botánico escocés Robert Brown con muestras vegetales, confirmó que la materia está compuesta de átomos. 

La Relatividad Especial que nos enseña que la velocidad de la luz es constante e independiente del movimiento del observador que la mide, con lo que Einstein pudo introducir cambios a las ecuaciones de la mecánica haciendo compatibles las leyes de la mecánica con las ecuaciones de la electricidad y el magnetismo. 

E=mc². Es la equivalencia materia-energía, “la luz transporta masa” dijo Einstein. No existe algo así como el Éter por medio del cual viaja la luz, como se creía en esos días. Esta ecuación es la base de la energía nuclear. 

Diez años después, en 1915, desarrolló la Teoría de la Relatividad General con la que descubre que la gravitación ejercida por los cuerpos celestes curva el espacio. La relatividad general ayuda a explicar la naturaleza de los agujeros negros, donde la atracción gravitacional es máxima. Con la Relatividad también se hacen correcciones a los cálculos de localización satelital GPS para dar resultados más precisos. 

Los descubrimientos de Einstein y de otros paisanitos de la tierra de Ashkenaz אשכנז –Alemania- y sus amigos del Imperio del Este, Dinamarca e Inglaterra: Born, Bohr, Schrödinger, Heisenberg, Dirac y otros, crearon nuevas ramas de la física: nuclear y cuántica. 

Pero como el dictador de Alemania era peor que Hómon Arashi de Persia, no quería a los ashkenazim, despreció su física nuclear porque era ciencia judía y los expulsó de su país – que no era su país, porque él venía del Imperio del Este, como mis bisabuelos, y se metió de colado a la tierra de Ashkenaz. 

Su ministro de Ilustración y Propaganda, que le era más fiel que su perro, quemó todos los libros que escribieron los ashkenazim, incluidos los de Einstein. No le digan a nadie, pero años después, al final de la guerra que inició el dictador de la tierra de Ashkenaz, murió su ministro pirómano de propaganda, lo quemaron, y quedó como pollito rostizado, … a eso le dicen karma, pero esa es otra historia. 

Entonces, antes de la guerra los paisanos se fueron muy tristes con su física nuclear a otra parte, Einstein, Born, Bohr, Schrödinger y otros. La mayoría al Reino Unido y América. Y dejaron haciéndose bolas solito a su amigo Heisenberg, porque como era más necio que yo, no quería dejar la tierra de Ashkenaz. 

Después Noah pregunto si Albert Einstein había sido el científico más grande de la historia. 

Consideramos a Einstein como el científico más grande del Siglo XX, y a Isaac Newton, quien inventó el cálculo, la teoría de las series infinitas, la teoría de la luz y el color, y descubrió las leyes de la gravitación y de la mecánica clásica, como el científico más grande hasta ahora. 

Es que en la época de Newton, en 1666, había pandemia, se encerró en su casa, y lo único que podía hacer era pensar. 

¡Y que se le pasa la mano! 

Pero científicos como Turing, Feynman y Tao aprendieron cálculo de niños, leyendo solitos en casa. Tal vez cuando enseñen Newton en kínder, apreciemos más a Einstein. 

De repente Noah dice: 

- La Tierra tiene 4 millones de años de edad. 

 A lo que contesté: 

- No, tiene 6500 millones de años, no quattro; pero googlealo para checar… 

Nomás me pasé por 2000 millones, porque la Tierra solo tiene poco más de 4500 millones de años de edad. 

Veo que Noah recordó el 4, pero no cuantos cientos de millones seguían después de ese número. A Noah y a mí todavía nos falta mucho que aprender… 

Maya estaba comiendo bien calladita, creo que su onda no es la física nuclear. 

Terminaron de comer y se pararon a jugar a otra parte. 

Al final ya no le conté a Noah la historia de la bomba atómica: 

En la tierra de Ashkenaz los físicos Hans, Straßman y Meitner descubrieron la fisión nuclear: cómo partir los núcleos atómicos usando neutrones para formar dos o tres átomos a partir de uno. Es una reacción que libera mucha fuerza, mucha energía. 

Cuando los físicos nucleares vieron la ecuación de Einstein: E=mc², se dieron cuenta que podían convertir una pequeña cantidad de masa m, en una enorme cantidad de energía E por medio de la fisión nuclear, rompiendo los núcleos atómicos. Porque c², el cuadrado de la velocidad de la luz, es un número inmensamente grande por el cual se va a multiplicar una masa de un elemento químico, produciendo una energía E más inmensa. 

Einstein no se metió con la bomba atómica, solo puso su firma para que el presidente de América supiera que a Heisenberg le habían pedido hacer una bomba atómica.

Un día en América, estaba otro ashkenazi llamado Robert Oppenheimer que no podía estarse quieto porque era el rey de las shpilkes. 

Llegó el soldado Leslie Groves y le dijo: 

- Heisenberg está haciendo la bomba atómica ¿y tú qué? 

- Achis achis…! 

Entonces en la guerra contra el dictador del Imperio del Este, Oppenheimer le echó carreritas a su amigo Heisenberg a ver quién hacía primero la bomba atómica. 

Groves le consiguió a Oppenheimer todo lo que necesitaba para hacer su bomba atómica. Y este llamó a los paisanos de la tierra de Ashkenaz, Hungría, Dinamarca y América, y a sus amigos italianos e ingleses: Fermi, Bohr, Teller, Wigner, Neumann, Szilard, Feynman, Chadwick, Lawrence, … y se juntaron con muchos físicos, matemáticos e ingenieros de otros lugares, para echarle montón a Heisenberg. 

Se fueron a un desierto a jugar a la bomba atómica, hasta que hicieron una de uranio y otra de plutonio, y las llamaron Little Boy y Fat Man. Teller que no quería jugar a las bombas de uranio y plutonio, se fue a un rincón a diseñar su bomba de hidrógeno. 

Como Heisenberg se quedó solito con el dictador del Imperio del Este, que no le gustaba la física nuclear, no pudo hacer su bomba atómica. 

¡Mejor! Porque si hubiera ganado Heisenberg, no estaríamos aquí. 

Tampoco le dije a Noah qué había inventado Albert Einstein, junto con su amigo de la bomba atómica, Leo Szilard: 

El refrigerador de gas de 1930. 

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Imagen: Albert Einstein 1882. http://th.physik.unifrankfurt.de/~jr/physpiceinstein.html., Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=1821347